Charlemos sobre educación

Si se fijan, hay programas en la radio y en la televisión para casi todo: para las relaciones sentimentales de los famosos, para encontrar pareja, para los deportes, por supuesto, para los toros, para pseudo debates políticos… hasta para cambiar de imagen si crees que la tuya está desfasada. ¿Conocen, sin embargo, algún programa dedicado a la educación? No de esos que te dicen cómo criar a tus hijos con teorías con las que puedes estar más o menos de acuerdo. Tampoco aquellos destinados a enderezar las vidas de verdaderos desalmados adolescentes. Me refiero a programas destinados a hablar de nuestras aulas, de nuestros escolares; de lo que pasa dentro de un centro educativo, en definitiva.

Uno de los males endémicos de este país es que la educación nos importa un pimiento, reconozcámoslo de una vez. Da juego cuando hay un cambio de ley, cuando quieren introducir una asignatura que a los docentes nos la trae al pairo, cuando en un IES ocurre algún trágico o morboso suceso; pero poco más. Si nos importara de verdad, como mínimo, tendríamos algún programilla dedicado a ella. Pero aquí parece que con compararlo todo con Finlandia nos vale. Bueno, así está el sistema educativo, pobre mío, qué más le vamos a pedir…

Desde este espacio que tengo el honor de que me hayan concedido, trataremos temas relativos a la enseñanza y a la educación. Dos conceptos que, si bien antaño solían diferenciarse semánticamente, en la actualidad parecen unidos insoslayablemente por la deriva ética, educacional, de valores en la que nos hallamos inmersos.

Educación comentada por profesionales del aula, de esos que día a día lidiamos con adolescentes de treinta en treinta (por lo menos). Sin “expertos”, basada en el trabajo de campo, no en teorías exocéntricas.

Nos leemos.

Pablo Poó.