Nuevo en esta plaza

Hola soy Israel Lancho y me presento ante ustedes en esta nueva experiencia para mí de escribir en “El Correo Extremadura”

Prometo comprometerme, no dejarme nada dentro y escribir todo tal cual lo sienta.

Espero no pasar desapercibido, porque eso es lo peor que me podría pasar. Soy de los que piensan que si se toma una decisión hay que ir hasta el final, porque quedarse con la sensación de que no lo has dado todo o que no te has comprometido, no es honesto ni con el público ni contigo mismo. Así  que adelante.

Siempre daré mi punto de vista en cada tema que yo mismo elegiré, no dejaré influenciarme por nada, ni por nadie. No voy a  encasillarme en el tema taurino solamente, tocaré también temas de actualidad, sociedad, actitudes, incluso formas de vida o de pensar.  La verdad es que es una extraordinaria oportunidad para crecer como persona y no voy a desaprovecharla. Para mí la vida se compone de experiencias y a mí me gusta vivir.

Hablando de la vida, la gente tiende a tenerle miedo a la muerte o a la forma en que moriremos, para mí la muerte es algo natural, forma parte de la vida, y lo que sí que me preocupa es cómo voy a vivir los días que queden. Yo que he tenido la experiencia de sentir la muerte muy cerca, os digo que me gusta vivir con intensidad y verdad, pero eso es algo que ya os iré contando más adelante y poco a poco. Lo que más me gustaría, es poder transmitiros algo, como ya os dije antes, no quiero pasar desapercibido.

Bueno ya nos iremos conociendo poco a poco, despacio… “Despacio como planean las águilas seguras de sus presas. Despacio, virtud suprema del toreo. Despacio, como se apartan los toros en el campo. Despacio, como se doma un caballo. Despacio, como se besa y se quiere, como se canta y se bebe, como se reza y se ama. Despacio” (Álvaro Domecq y Díez).

Fdo.: Israel Lancho.