Así, aunque desde primera hora los efectivos municipales han esparcido sal y retirado parte de la nieve, en muchos puntos de Piornal los montones de nieve igualaban a los de nabos, hasta un total de 24 toneladas dispuestas de la hortaliza para esta fiesta.
Para la jornada del lunes estaba previsto que, entre las salidas protagonizadas durante la mañana y durante las de la tarde, vistieran el traje de Jarramplas entre 16 y 19 personas, según Beites. Son los mayordomos "amigos y familiares" de los Jarramplas oficiales que colaboran en el mantenimiento y organización de la fiesta.
La primera salida comenzaba a las 10.30 horas, media hora antes de la hora oficial, aunque este adelanto ya estaba previsto por los Jarramplas de este año "para que dé tiempo a vestirse a más gente y que sea más tiempo en la calle", ha dicho Beites,
Esta salida culminaba en torno a las 13.40 horas sin incidentes de importancia, aunque los resbalones de los asistentes y el frío hacia mella en muchos de los participantes.
Sin embargo las salidas más esperadas son las del martes, sobre todo la salida principal después de la misa en honor a San Sebastián, prevista para las 11.00 horas.
Tras estos dos días de fiesta se esconden muchos meses de trabajo por parte de los Jarramplas y sus familias, como mostraba Sandra Beites, hermana de Raúl, quien destacaba que la familia y amigos llevan cosiendo tiras al traje "desde el 20 de septiembre más o menos".
Se ha tardado en culminar la confección unos dos meses además del tiempo de elaboración de las máscaras, las cachiporras y el resto de indumentaria y complementos con los que se revisten los protagonistas de la fiesta.
Este año entre las novedades se encuentra la nueva armadura que portan los Jarramplas elaborada con fibra de carbono en vez de con fibra de vidrio, lo que hace más llevadero el tramo de Jarramplas "y sigue aportando peso (unos 25 ó 30 kilos), que es necesario para soportar el impacto de los nabos".
Unos nabos que vuelven a marcar un "récord", según el alcalde de Piornal, Ernesto Agudiez, quien ya señaló que este año por las condiciones meteorológicas se ha producido "una gran cosecha", a la que se añade que el agricultor de Jarandilla de la Vera (Cáceres) al que se le adquieren los nabos ha aumentado la extensión.
Esta fiesta fue declarada fiesta de Interés Turístico Nacional en resolución del 1 de diciembre de 2014 de la Secretaría de Estado de Turismo y que publicada en el BOE del 20 de diciembre de 2014.
Una declaración que hace que sea "una responsabilidad mayor", según Raúl Beites, por lo que el deseo del equipo organizador es "que todo salga bien" para que la fiesta "siga creciendo".