La organización profesional agraria UPA-UCE Extremadura ha pedido a la Administración regional que el plan del cereal "no se centre únicamente" en la Campiña Sur sino que se extienda al resto de comarcas cerealistas de Extremadura.
De esta forma, en nota de prensa ha demandado que el impulso a este sector "no se centre únicamente" en la Campiña Sur, pues las zonas de La Serena y Olivenza también son "comarcas estratégicas" para el desarrollo del cultivo en la región.
Tras la reunión mantenida este viernes con el director general de Agricultura y Ganadería, Antonio Cabezas, sobre la situación del sector del cereal en la comarca de la Campiña Sur, UPA-UCE ha demandado a la Junta que las medidas adoptadas se extiendan al resto de comarcas cerealistas de Extremadura.
Para el secretario de Agricultura de UPA-UCE, José Cruz, la situación del cultivo cereal en la región es "preocupante" debido a los "bajos precios" que son consecuencia de los "movimientos especulativos de los mercados globales".
Cruz también ha señalado el "alarmante problema fitosanitario" que vive el cultivo en la región, al que "hay que dar una solución inmediata".
"Hemos acordado con la consejería la quema controlada de rastrojos de forma excepcional para este año, pero tenemos que seguir trabajando para aportar soluciones a los agricultores", ha apuntado.
Algunas de las propuestas que han salido de esta reunión se centran en el estudio de nuevas variedades y la diversificación mediante la introducción de nuevos cultivos en las zonas cerealistas (como cultivos permanentes, la quinua; o la rotación con cultivos como la colza).
Asimismo se ha planteado la creación de un seguro de renta para el cereal y un mayor control y seguimiento de las Agrupaciones para el Tratamiento Integrado en Agricultura (ATRIAS) de la sanidad vegetal, creando una red de alerta sanitaria que minimice el impacto de las plagas.
Desde UPA-UCE han apostado por informar a los productores de cereal de estas medidas con charlas informativas en las comarcas productoras, y por investigar nuevas líneas de ayuda en el marco de la Política Agrícola Común para mejorar la situación del sector.
Cabe recordar que Extremadura cuenta con 220.000 hectáreas de cereal de invierno, que producen un total de 440.000 toneladas al año de trigo blando, trigo duro, cebada y avena, principalmente.