El diputado del Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Extremadura Francisco Ramírez ha criticado a la Junta por haber elegido, según indica, la vía del "decretazo" en la lugar de la del "diálogo" en la regulación de las gasolineras low-cost en la comunidad.
En este sentido, en nota de prensa, ha señalado que "por este camino" el gobierno autonómico del socialista Guillermo Fernández Vara "se ratifica en su usual sectarismo" y en su "permanente ninguneo al parlamento".
Según ha señalado, en la sesión parlamentaria de 25 de febrero, el Grupo Popular en la cámara regional "votó a favor" de una propuesta del PSOE para aprobar una normativa que regule los servicios de estas gasolineras pero, sin embargo, condicionó ese apoyo a que el procedimiento para legislar este asunto sea el "ordinario, para que todos los sectores afectados por esta regulación pudiesen comparecer en el parlamento y así sus aportaciones tuvieran reflejo en dicha norma".
Para Ramírez, Fernández Vara "siga empeñado" en "gobernar desde el sectarismo", y "sin enterarse de que gobierna en minoría" y, en este caso, "no sólo vuelve a silenciar el parlamento", sino que "además, le pone una mordaza a los afectados", a los que "únicamente les da siete días, sin previo aviso, para que pongan alegaciones".
"Esta manera de gobernar sí que es vieja política", ha argumentado el diputado del Grupo Popular, para quien "el presidente de la Junta se ha quedado anclado en la época del rodillo socialista".
Así, ha reclamado al Gobierno regional que "reflexione" y "dé marcha atrás en su política de las imposiciones", porque "ni la sociedad extremeña, ni los afectados por este decreto, ni el Grupo Popular, tolerarán tanto despropósito".
"El señor Vara debería tener muy presente que esta actitud ya le supuso que sus primeros presupuestos fueran devueltos a los corrales", ha concluido el 'popular'.