Y aunque parezca mentira no todos están de acuerdo, no todos quieren seguir el mismo camino, no todos tienen las neuronas en modo off, hay algunos políticos que tienen muy claro el camino que quieren seguir, la senda por la que continuar esta andanza en la que se embarcaron en su día, hay políticos listos, sí, no se extrañen los hay, solamente hay que dar con ellos, ardua tarea la que nos queda, encontrar a los listos. ¡A por ellos!
Están ahí, no están escondidos, aunque a veces da la sensación de estar agazapados, esperando la oportunidad para que los tengan en cuenta, esperando a que aquellos que tienen el ego por las nubes se echen a un lado, están ahí, lo sé.
La vida pone a cada uno en su sitio, da los pasos oportunos para que nos vayamos dando cuenta si es el camino que estamos llevando el adecuado, pero claro, no es lo mismo que nos pase a ti y a mí que tenemos las obligaciones de todo hijo de vecino que le pase a uno de nuestros políticos, que son la imagen y el reflejo para muchos.
Estas últimas elecciones creo que van a ser el punto de inflexión, van a marcar un antes y un después en las filas de los partidos, entre los miembros de los mismos y, donde es más importante, en las cabezas visibles, en la imagen de cada organización que han quedado muy tocadas.
Estoy escuchando por ahí que, por ejemplo, Pedro Sánchez ha salido reforzado, ¿cómo? Cuando me lo dijeron fue lo que pregunté, ¿cómo? ¿Salir reforzado es ser el líder de una formación con un peso específico importante en nuestro país y volver a conseguir el peor resultado de su historia? Es más, en cada ocasión que se ha presentado él los resultados han sido malos, por no decir peores, ¿eso es salir reforzado?
Claro está, mirando las caras de unos y de otros la del líder socialista era de victoria y sigue siéndolo porque esa sonrisa de oreja a oreja.
Decía yo que el 26J marcaría un antes y un después, está claro que sí. Los resultados han puesto a cada uno es su sitio: está el que ha mejorado el resultado de las elecciones anteriores y que siente como los votantes creen en él; está el que como siga pidiendo elecciones a este paso deja a los populares solos en la cámara; están los que se han unido pensando que uno más una eran siete, como decía la canción, y no, han sido lo mismo e incluso un poquito peor; y está el que no sabe cómo, no se lo cree y mira para otro lado para no ver sus resultados, perdón, los de su organización, peores que los anteriores, y no suyos porque él solito arrasa por donde pasa.
Y esos sitios en los que han quedado situados cada uno de ellos serán los que marque el devenir político de nuestro país, será ahora cuando esos políticos listos, como yo les digo, tendrán que poner sus narices sobre la mesa y decir ¡aquí estoy yo! porque sino… Pues eso, aquí estoy yo, no se preocupen que para hablar de listo y tontos tengo el teclado listo.
