Amigos de Badajoz pide al ayuntamiento, Aqualia y la Junta que 'extremen las precauciones' en la obras de reparación

La Asociación Amigos de Badajoz solicita al ayuntamiento de la ciudad, a la concesionaria del servicio municipal de agua, Aqualia, y a la Junta de Extremadura que, en el cumplimiento de sus "obligaciones" y lo dispuesto en la Ley de Patrimonio, "extremen las precauciones en la obras de reparación y se comprometan en el seguimiento arqueológico de las mismas".

En nota de prensa, la junta directiva de Amigos de Badajoz se ha mostrado "preocupada por el desastroso estado de la red de abastecimiento de agua potable", cuyas continuas roturas "provocan graves inconvenientes al vecindario, cuantiosas pérdidas económicas y aunque parezca mentira, en algunas ocasiones amenaza el patrimonio arqueológico de Badajoz".

"Son numerosos los casos que podríamos citar, pero basta con recordar la rotura de la tubería en la Puerta del Capitel. Dicha rotura vino a coincidir con el posible emplazamiento de la puerta de una barbacana. La rotura de la tubería y el posterior socavón removió tierras susceptibles de contener restos de dicha puerta", ha puntualizado sobre dicha puerta de la Alcazaba de la ciudad.

NUEVA ROTURA EN LA PLAZA DE SAN ANDRÉS

A este respecto, ha agregado que el pasado 23 de septiembre se ha producido una nueva rotura en la plaza de San Andrés, "en un punto muy próximo donde estuvo la cabecera de la ermita de San Andrés y a un recinto adosado a ella".

"La ermita fue demolida pero es razonable suponer que los cimientos de sus muros, situados bajo el nivel de la calzada, no fuesen demolidos y por tanto podrían verse afectados por dicha rotura", ha puntualizado Amigos de Badajoz, para quien "la presencia de dichos muros podría aportar una valiosa información sobre al ermita pues en alguna ocasión se ha especulado que la ermita fuese una mezquita cristianizada a la que, al igual que Santa María del Castillo, se cambió su orientación".

Por último, la asociación ha apuntado que el conjunto de la plaza "o al menos el entorno inmediato de la ermita" fue un viejo cementerio del que da cuenta Rodrigo Doma Delgado en su obra Discursos Pátrios de la Real Ciudad de Badajoz y en su tiempo (finales del siglo XVI).