El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Cáceres ha pedido soluciones para los propietarios de parcelas del Camino de la Mina Valdeflores, ya que a pesar de que la tubería que les surte de agua pasa íntegramente por el término municipal de Cáceres, es el Ayuntamiento de Sierra de Fuentes, a través de la concesionaria Acciona, quien les cobra el servicio.
El portavoz municipal Luis Salaya ha explicado que se da "una situación paradójica", ya que las parcelas pertenecen al término municipal de Cáceres, los propietarios pagan los impuestos a la capital cacereña y, sin embargo, "el agua se le cobra desde Sierra de Fuentes".
Salaya recuerda que hace más de un año, el Ayuntamiento de Cáceres se sentó con los propietarios a los que "no se dio una solución" porque ésta "es muy costosa". Esta situación se ha agravado desde el año pasado, señala, "cuando el Ayuntamiento de Sierra de Fuentes empezó a cobrar una cuota de servicio de abastecimiento de 40 euros cada dos meses, mientras que el Ayuntamiento de Cáceres a través de Canal de Isabel II cobra 6,57 euros".
Según el PSOE los propietarios "se sienten abandonados por el Ayuntamiento", y considera "intolerable" que no se les busque una solución "ya que son ciudadanos cacereños y por tanto el servicio de agua debe ofrecerse desde esta ciudad, como ocurre con el resto de la población".
"Esta situación supone un agravio comparativo para estos propietarios, ya que tienen que pagar al agua más cara que el resto de los cacereños, ante la falta de soluciones de este equipo de Gobierno", destaca el portavoz socialista en nota de prensa.
Además, el Grupo Municipal Socialista solicita al ayuntamiento cacereño que arregle el camino que se dirige a la mina de Valdeflores y por la que estos propietarios tienen acceso a sus fincas, "porque hace tiempo que una máquina perforadora que se dirigía a la Mina destrozó el camino sin que nadie lo haya arreglado".
"Por ello exigimos al equipo de Gobierno que acelere el expediente sancionador a la empresa de la perforadora, si lo hubiera abierto, o que tome las medidas necesarias para que los propietarios de estas fincas puedan ver respetados sus derechos como el resto de cacereños y cacereñas", concluye Salaya.
